Jean Colombe Libro de Horas de Besançon (1470 circa) Miniatura. Biblioteca municipal de Besançon |
Un aspecto del libro de horas de Carlos VIII de Francia, conservado en la Biblioteca Nacional de España. |
Un museo puede interpretarse de muchas maneras. A la visión artística, histórica o antropológica, un dermatólogo puede aportar nuevos enfoques sobre patología, cosméticos, terapéutica, simbolismos, usos u otros aspectos de interés.
Jean Colombe Libro de Horas de Besançon (1470 circa) Miniatura. Biblioteca municipal de Besançon |
Un aspecto del libro de horas de Carlos VIII de Francia, conservado en la Biblioteca Nacional de España. |
La Natividad de Jesús
(s. XIII)
Vidriera
Capilla del Corpus Christi. Catedral de Girona |
Valeria Cannata Mi lección de anatomía (2020) Fotografía digital / Edición digital / Digital print 100x150 cm |
"Muchas mujeres se destacaron a lo largo de la historia ya sea como filósofas, astrónomas, escritoras, artistas, matemáticas, físicas o médicas, pero tuvieron que trabajar en la clandestinidad para escapar de la sospecha de brujería y de la opresión a la que estaban sometidas por parte del patriarcado y por la sola condición de ser mujeres. La presencia femenina en la ciencia fue negada desde el principio de los tiempos pero siempre hubo alguna mujer valiente que pudo dedicarse a su vocación. Aunque hoy en día el número de mujeres en la universidad supera al de los hombres, y si bien la presencia de las mujeres en losámbitos científicos a dejado de ser una rareza, siguen sin alcanzar las posiciones directivas y de poder de sus colegas masculinos."
Ángel Planells La dona impúdica (1933) Óleo sobre tela 101,5 x 71 cm MNAC. Barcelona. |
Francisco de Goya y Lucientes Riña de gatos (detalle) (1786) Cartón para tapiz Museo del Prado. Madrid. |
Riña de gatos es un cartón para tapiz pintado por Goya en 1786. Fue encargado al pintor entre los años 1786 y 1787. El tapiz debía formar parte de la decoración de las estancias de los Príncipes de Asturias, en el palacio de El Pardo. En aquel momento los príncipes eran el futuro Carlos IV y su esposa María Luisa de Parma.
El proyecto ornamental del salón consistía en las Cuatro Estaciones y una serie de escenas descritas como "pinturas de asuntos jocosos y agradables". El cartón de los gatos tiene una forma muy alargada y una perspectiva muy forzada, por lo que se puede deducir que su destino era la decoración de una sobreventana. Formaba pareja con una escena con vuelos de pájaros, del que se ha perdido el cartón original y solo conocemos el tapiz resultante. Los tapices no llegaron nunca a colgarse en su destino porque en diciembre de 1788 murió el rey Carlos III, y su sucesor, su hijo Carlos IV no se interesó en decorar ese palacio.
Paul de Vos: Pelea de gatos en la despensa. |
Otro cuadro sobre un tema parecido es el realizado por el pintor Paul de Vos (1746) que representa una pelea de gatos en la cocina o en la despensa, siguiendo las temáticas de bodegones con escenasó anecdticas pintadas por su maestro, Franz Snyders. El cuadro aparece marcado con una flor de lis en su ángulo, ya que perteneció a la colección de Isabel de Farnesio, que marcaba así los cuadros de su colección.
El aspecto feroz de los gatos enfrentados nos da pie a considerar el tema de los animales que pueden infectarse por COVID-19, entre los que se cuentan los felinos.
Qué sabemos actualmente de la infección por SARS-CoV2 en animales?
Los investigadores usaron modelos computacionales para probar cómo el virus SARS-CoV2 utiliza sus proteínas espiga. Estas proteínas sobresalen de la superficie del virus y se infiltran en las células de diferentes animales. El principal punto de entrada en las células es el receptor ACE2, que se une a la proteína espiga encajandode la misma manera que una cerradura y una llave. Existen muchas variantes diferentes de ACE2 en las diferentes especies, y estas variaciones explicarían la mayor susceptibilidad de las distintas especies animales. Esta variabilidad también explicaría los diferentes grados de gravedad de los humanos infectados por el coronavirus.
Estos hallazgos pueden explicar por qué la enfermedad puede afectar a los visones, un animal muy similar a los hurones. Su hacinamiento en granjas favorecería la transmisión entre estos animales. La posible transmisión de los visones a sus cuidadores y la detección en ellos de una variante del virus, que podría causar la inoperancia de las vacunas actualmente diseñadas ha planteado la conveniencia del exterminio masivo de estos animales de granja.
Gustav Klimt Dánae (1907) Pintura al óleo y lienzo. (77 x 83 cm) Leopoldmuseum. Viena |
"La lluvia dorada que se desliza en el cuerpo transformado de Dánae da a este antiguo motivo algo sagrado, como si hubiera trascendido este mundo. Consigue lo que una pareja masculina nunca podría hacer: transformar la carne en una obra de arte. El erotismo se convierte en un icono. La obra representa la feminidad completamente autónoma".
Detalle de las decoraciones del manto de Dánae en la obra de Klimt (arriba). Compárese con el esquema de un blastocisto (abajo). |
Dibujo esquemático de un corte de un óvulo humano y de células de la corona radiada post ovulación. Anatomía de Gray (1911) |
Detalle de los círculos concéntricos y rectángulos alargados en El Beso. Aluden a óvulos y espermatozoides? |
Salvador Dalí La estructura del ADN Obra estereoscópica. Museo Teatro Dalí Figueres |
¿Qué son las vacunas de ARN mensajero? ¿Hay algún riesgo de que puedan causar alteraciones en el ADN de la persona vacunada?
Las vacunas de ARN mensajero son un nuevo tipo de vacunas, que hasta ahora no existían. Su actuación se basa en mecanismos totalmente diferentes de las que existían hasta ahora.
Vamos a empezar por recordar el principio de la vacunación: es una estrategia de inmunización de la población ante enfermedades basada en entrenar al sistema inmune para que reconozca las amenazas, los patógenos que causan esas enfermedades, y así pueda defenderse de ellas.
Para ello, las vacunas introducen en el organismo una versión debilitada de esos patógenos, que se han convertido en inocuos tras haberlos sometido a tratamientos térmicos o químicos. Puede ser el propio patógeno atenuado o desactivado o puede ser solo una parte de ese patógeno, una proteína. Es lo que se llama antígeno.
Al hacerlo, el sistema inmune lo reconoce y desarrolla los anticuerpos específicos necesarios para defenderse de él. Es lo que se llama inmunidad adquirida, que permite una respuesta rápida y eficiente de las defensas cuando aparece el patógeno activo.
En busca de nuevos sistemas de vacunación: las vacunas de ARN mensajero
Las vacunas han supuesto uno de los grandes progresos médicos, mejorando mucho la salud pública e incrementando la esperanza de vida de la población. Pero su producción es compleja y costosa, y actualmente no tenemos vacunas para todas las enfermedades. Además del reto que supone la Covid-19 actualmente, otras muchas infecciones como el sida (causado por el VIH) tampoco tienen todavía vacuna efectiva. Por eso es importante seguir investigando en este campo y considerar nuevos sistemas de vacunación.
Una de las líneas de investigación más reciente en este campo es el de las llamadas vacunas de ARN mensajero, en las que en vez de introducir en el organismo un patógeno atenuado o una parte de este, se introducen las instrucciones para que sea nuestro propio organismo el que produzca el antígeno (en este caso una proteína) que desencadene la reacción del sistema inmune.
Las funciones del ADN y el ARN
Vamos a comentar ahora que son los ácidos nucleicos (ADN y ARN) y que funciones desempeña cada uno.
En el núcleo de las células de los organismos vivos hay una molécula de ADN (ácido desoxirribonucleico) que contiene la información genética de ese ser vivo. Está compuesta por una larga serie en la que se enlazan cuatro bloques, y el orden en el que se dispone esta secuencia da las instrucciones necesarias para fabricar proteínas. Para que este proceso se lleve a cabo hace falta un intermediario, otro ácido nucleico, el ARN (ácido ribonucleico), que traslada la información genética del ADN del núcleo a las estructuras de la célula capaces de sintetizar las proteínas.
Así, podemos comparar el ADN a un libro de recetas en una biblioteca: en él están guardadas las recetas almacenadas pero no se utilizan. Los pinches de cocina van a la biblioteca y hacen una copia de una receta concreta (= ARNm) y la llevan a la cocina (= la maquinaria celular) donde el chef va añadiendo los ingredientes en el orden y cantidades que marca la receta y así hace la tarta (= la proteína).
Las vacunas de ARN mensajero (ARNm) se aprovechan de este sistema y en vez de introducir el antígeno, introducen una secuencia de ARN con las instrucciones para producir el antígeno. Una vez que esto ocurre, el resto del proceso de inmunización es igual que en cualquier otra vacuna: el sistema inmune desarrolla los anticuerpos específicos para combatir ese antígeno y a partir de ahí lo recordará por si vuelve a aparecer para poder neutralizarlo.
El ARN mensajero es una molécula intermediaria entre el núcleo (donde está el ADN) y el citoplasma, fuera del núcleo de la célula, que es donde se fabrican las proteínas. Al utilizar ARN mensajero estas vacunas le están proporcionando a las células las instrucciones para que estas fabriquen proteína S del coronavirus. Estas moléculas de ARN mensajero son extraordinariamente lábiles [frágiles], y desaparecen muy rápidamente tras ser usadas para producir proteína S.
Ventajas de las vacunas de ARN mensajero
¿Pueden las vacunas de ARNm alterar nuestro ADN?
Las vacunas mensajero de ARN son seguras porque no contienen agentes infecciosos.
Algunas voces críticas les atribuyen el supuesto riesgo de que puedan modificar nuestro ADN causando daños aún desconocidos, lo que puede generar inquietud en algunas personas, y motivar el rechazo de este tipo de vacunas.
Pero eso no es posible: una molécula de ARN mensajero no puede de ninguna forma interferir o cambiar la secuencia de ADN de nuestras células, ya que a diferencia del ADN que se encuentra dentro del núcleo de la célula, el ARN se encarga de llevar las instrucciones a la maquinaria celular que se encuentra fuera del núcleo y luego desaparece. La molécula de ARN no entra en el núcleo durante el proceso y por eso no hay riesgo de que se integre en el genoma. El ARN se administra, cumple su función y luego se degrada y se destruye, desapareciendo. Es decir, las vacunas de ARN desaparecen tras cumplir su función.
Siguiendo con la comparación de cocina que usábamos antes, modificar el ADN sería añadir un ingrediente extraño en una receta que ya existe, lo cual podría suponer que el plato resultante sea distinto. Pero inyectar ARN sería como añadir de forma temporal una nueva receta en el libro de cocina sin tocar las que ya tiene el libro, y por tanto no habría cambios inesperados en las recetas previas.
Salvador Dalí: Paisaje de mariposas
(El gran masturbador en un paisaje surrealista con ADN).