Peine (1550-1425 a.n.e.) Peine de madera- Arte egipcio (Dinastía XVIII) Museo del Louvre. París. |
En el Egipto faraónico, el cuidado del cabello era primordial. El uso de pelucas era normativo, tanto en hombres como en mujeres, los sacerdotes se rasuraban la cabeza en señal de pureza, y los niños de la nobleza se rapaban la cabeza, dejándose una trenza lateral, como puede verse en las numerosas figuritas de Horus niño (a veces en el regazo de su madre Isis), en las que aparece chupándose el dedo índice y con la trenza lateral propia de su edad. Esta figura alcanzó una gran popularidad en la época helenística, en la que era conocida con el nombre de Harpócrates.
Es también habitual encontrar en las tumbas cofrecillos con cosméticos y complementos para el cuidado del cabello o objetos como peines. Algunos de ellos, decorados con figuras, como en el caso de éste peine de madera del Imperio Nuevo (dinastía XVIII), en la que aparece un íbice, un tipo de cabra de Nubia (Capra ibex nubiana). El animal aparece de lado, con una rodilla flexionada en el suelo, luciendo sus hermosos cuernos. Una pieza bella y delicada, testimonio del arte egipcio de este período, que nos demuestra la ornamentación de algunos objetos cotidianos de esta fascinante civilización.
El peinado característico de los niños nobles egipcios era el pelo corto o rasurado y una trenza lateral |
Horus niño (Harpócrates) con la trenza lateral infantil bajo la doble corona y chupándose el dedo |
Es también habitual encontrar en las tumbas cofrecillos con cosméticos y complementos para el cuidado del cabello o objetos como peines. Algunos de ellos, decorados con figuras, como en el caso de éste peine de madera del Imperio Nuevo (dinastía XVIII), en la que aparece un íbice, un tipo de cabra de Nubia (Capra ibex nubiana). El animal aparece de lado, con una rodilla flexionada en el suelo, luciendo sus hermosos cuernos. Una pieza bella y delicada, testimonio del arte egipcio de este período, que nos demuestra la ornamentación de algunos objetos cotidianos de esta fascinante civilización.