viernes, 29 de noviembre de 2019

Las brochas infectadas de la Gran Guerra






Soldados afeitándose en el frente
(1915) 

Fotografía B&N 
Archivo



A la Primera Guerra Mundial también se le llamó Gran Guerra, tal vez por ser una mortífera contienda donde los combatientes fueron diezmados no solamente por las armas de fuego enemigas sino que también fueron acosados por gases; hambre; enfermedades; y por el frío y la humedad de las trincheras. Entre los muchos episodios dolorosos que se vivieron se olvida frecuentemente uno, que contribuyó a acosar a las tropas. Muchos soldados del ejército británico y norteamericano presentaron lesiones de carbunco en la cara o cuello. 

La enfermedad afectaba a grupos de soldados de la misma compañía o destacamento por lo que en un primer momento se pensó que el enemigo había realizado ataques con armas bacteriológicas, esparciendo los bacilos causantes de la enfermedad (Bacillus anthracis) mediante algún dispositivo bélico innovador.  El germen era ya bien conocido, ya que fue la primera bacteria que se identificó, a mediados del s. XIX, y efectivamente, décadas más tarde sería uno de los protagonistas de la guerra bacteriológica. Sin embargo, en esta ocasión no era el enemigo el que acosaba a la soldadesca, ni se debía a diabólicas tácticas del imperio austro-húngaro, sino que el causante estaba en el bolsillo de los soldados : eran las brochas de afeitar. 


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En el frente eran frecuentes los ataques con gases tóxicos, (clorina o gas mostaza) que causaban una gran mortandad. Para evitar sus efectos, los soldados se colocaban unas máscaras anti-gas. Y para que las máscaras se les ajustaran bien, debían llevar la cara completamente afeitada. En caso contrario, la eficacia protectora de la máscara disminuía. Por este motivo las soldados solían afeitarse unos a otros en las largas pausas que dejaba la guerra de frentes. 

Para obtener un buen afeitado hay que proceder a un buen enjabonado que permita una espuma persistente. Las brochas de afeitar de calidad suelen fabricarse generalmente con pelo de tejón, ya que las cerdas de este animal retienen mejor el agua y logran una espuma más persistente. Pero las penurias de la guerra y la necesidad de suministrar un gran número de brochas de afeitar a los reclutas, hizo que el suministro de pelo de tejón ruso fuera insuficiente y muy costoso. Se recurrió entonces a usar crin de caballo procedente de Rusia, China y sobre todo, Japón. La ingente cantidad de brochas y la premura con la que se necesitaban hizo que se descuidara un paso fundamental en su fabricación: la desinfección. A nadie se le ocurrió esterilizar ese pelo antes de fabricar las brochas, y la bacteria del ántrax es muy habitual en el suelo de lugares con ganado. Además, la ruta de envío se modificó, yendo por el Pacífico directamente de Asia a los Estados Unidos, país que entonces no tenía las mismas garantías de higiene y esterilización que en Europa. Según ulteriores investigaciones, más de un 10% de las brochas llegaban contaminadas por Bacillus anthracis


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Figura de cera representando una lesión de carbunco.
Fabricado por la casa Tramond, de París (s. XIX). 
Se conserva en el Museo Nacional de la Salud y la Medicina en Washington. 


Entre 1915 y 1924, 149 soldados estadounidenses, 28 soldados británicos y 67 civiles en ambos países contrajeron la enfermedad. Habrían sido muchos más si el gobierno estadounidense no se hubiera apresurado a obligar a los fabricantes de brochas de afeitar a esterilizar los pelos de animal antes de usarlos en sus productos. El ántrax cutáneo no es mortal, pero sí un auténtico contratiempo nada positivo para la moral de los soldados. En ocasiones, se han podido registrar casos de meningitis. 
El carbunco es una zoonosis mundial que afecta a muchos animales, sobre todo herbívoros. Se puede adquirir por diferentes vías: respiratoria, digestiva y cutánea.
La forma respiratoria es difícil de dignosticar y cursa al principio como una gripe y después con hipoxia y disnea, y la mitad de los pacientes presentan signos meníngeos. La gastrointestinal cursa con dolor gastrointestinal, sangrado y ascitis. La forma cutánea en la que el bacilo penetra por pequeñas heridas o erosiones (como las que con frecuencia se producen al afeitarse) supone más del 90% de los casos. De 1 a 10 días después de la inoculación, en la puerta de entrada aparece una pápula rojiza, que aumenta de tamaño rodeándose de una zona edematosa, con induración y formación de vesículas. Aparece luego una úlcera central, con exudado serosanguíneo que acaba formando una escara negra (la pústula maligna, que por su parecido con un tizón de carbón dio el nombre a la enfermedad). Son frecuentes las linfadenopatías locales, con malestar, mialgia, cefalea, fiebre, náuseas y vómitos. Un 20% de los casos pueden desarrollar septicemia, lo que antes de la introducción de los antibióticos suponía una muerte segura, aunque en la actualidad la mortalidad es de menos del 1%

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Tras esta experiencia, las brochas de afeitar y material de higiene personal son siempre sometidos a esterilización antes de comercializarse. Aún así en algunos países se han dado casos aislados, como un caso de meningitis en la India (1989) tras un rapado ritual (efectuado con brochas no homologadas).  

Agatha Christie, que fue enfermera voluntaria durante la Primera Guerra Mundial, conocía los casos de carbunco en brochas de afeitar por la prensa de la época. De hecho lo incorporó como arma letal en su novela “Cartas sobre la mesa (Cards on the table)” (1936), den la que aparece el célebre detective Hércules Poirot. En la novela, Mr. Craddock muere debido a las esporas presentes en su brocha de afeitar y su contagio a través de las abrasiones y cortes durante el afeitado. Pero Agatha Christie no explica como el asesino obtuvo las esporas, las manipuló y las colocó en la brocha sin riesgo para sí mismo.


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A veces, cuando me estoy enjabonando ante el espejo antes de proceder a afeitarme, no puedo evitar acordarme de aquellos sufridos soldados, gracias a los que en la actualidad disponemos de brochas de afeitado con plenas garantías higiénicas. Sin embargo, si hay entre los lectores algún aficionado a usar brochas vintage para afeitarse, mi consejo es que se asegure bien de que va a usar un material previamente esterilizado.  



Bibliografía

Anthrax from shaving brushes. Am J Public Health (N Y). 1925;15:440. http://dx.doi.org/10.2105/AJPH.15.5.440-a

Carey HW. Anthrax from the shaving brush and primary anthrax meningitis. Am J Med Sci. 1920;159:742–6. http://dx.doi.org/10.1097/00000441-192005000-00012 


Hubbard DS. Anthrax in animal hair. JAMA. 1920;75:1687–90. 


Katharios-Lanwermeyer S, Holty JE, Person M, Sejvar J, Haberling D, Tubbs H, et al. Identifying meningitis during an anthrax mass casualty incident: systematic review of systemic anthrax since 1880Clin Infect Dis. 2016; 62: 1537–45. DOI: 10.1093/cid/ciw184.  

http://dx.doi.org/10.1093/cid/ciw184


Leake JP, Lederer A. Isolation of the anthrax bacillus from shaving brushesAm J Public Health (N Y). 1919; 9: 114-9.

Szablewski CM, Hendricks K, Bower WA, Shadomy SV, Hupert N. Anthrax cases associated with animal-hair shaving brushesEmerg Infect Dis. 2017; 23: 806-808. DOI: 10.3201/eid2305.161554 

https://wwwnc.cdc.gov/eid/article/23/5/pdfs/16-1554.pdf

Symmers D, Cady DW. Occurrence of virulent anthrax bacilli in cheap shaving brushes. JAMA. 1921;77:2120–1. http://dx.doi.org/ 10.1001/jama.1921.02630530020010


Vázquez-Espinosa E, Laganà C, Vazquez F. Una visión histórica, socio-cultural y literaria de casos de Bacillus anthracis por brochas de afeitar [An historical, sociocultural view and in the fiction literature of Bacillus anthracis cases by shaving brushes]. Rev Esp Quimioter. 2018;31(3):203–208.

https://www.ncbi.nlm.nih.gov/pmc/articles/PMC6166252/




jueves, 28 de noviembre de 2019

La erisipela de San Juan de la Cruz (y II)


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Francisco Palma Burgos

Sepulcro de San Juan de la Cruz
 (1953)

Estatua de mármol

Oratorio de San Juan de la Cruz. Úbeda. 




En una entrada anterior trazamos un breve resumen biográfico de San Juan de la Cruz (1542-1591), fraile, místico y poeta, una figura que influyó de forma decisiva en las corrientes ideológicas de los territorios hispánicos en el s. XVI. 

El comentario de hoy comienza con la imagen del sepulcro de San Juan de la Cruz, en el oratorio dedicado al santo en Úbeda, ciudad donde murió. Este sepulcro sustituye al anterior sepulcro de mármol, obra de los hermanos Boluda, perdido durante la guerra civil de 1936. El actual es obra de Francisco Palma (1918-1985) imaginero que destacó por realizar diversos pasos procesionales de cofradías de la Semana Santa andaluza. 


Sepulcro de San Juan de la Cruz, en Segovia. 


En este oratorio de Úbeda fue el primer lugar donde se enterraron los restos  del místico carmelita, aunque por poco tiempo. En 1593, solamente dos años después de su muerte, sus restos, mutilados fueron trasladados furtivamente a Segovia, donde reposan actualmente.  El motivo era que Juan de la Cruz había sido trasladado a Úbeda como castigo, desposeído de todos sus cargos pero la mayor parte de su vida había transcurrido en Castilla.  

La muerte de San Juan de la Cruz acaeció pues en diciembre de 1591 en el convento del Monte de la Peñuela, en Úbeda, donde había sido trasladado apenas unos meses antes. 

En septiembre de 1591 le apareció una inflamación de la pierna derecha, con fiebre. Otro fraile de la comunidad presentaba síntomas similares. Aunque en un principio no le dio importancia, la inflamación va en aumento, por lo que los frailes le proponen acudir a un médico en Baeza. Pero Juan prefiere que lo vea un cirujano de Úbeda, ya que en Baeza era mucho más conocido. 

El 21 de septiembre Juan de la Cruz escribía una carta a Ana de Peñalosa donde decía: 
“Mañana me voy a Úbeda a curar de unas calenturillas que, como ha más de ocho días que me dan cada día y no se me quitan, paréceme habré menester ayudar de medicina; pero con intento de volverme luego aquí que cierto, en esta santa soledad me hallo muy bien”. 

Al llegar a Úbeda la inflamación había empeorado mucho y sobre ella habían aparecido cinco úlceras (algunos, en una interpretación mística, creyeron ver un símbolo de las cinco llagas de Cristo).  



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Francisco Antonio Gijón. Talla policromada de S. Juan de la Cruz (1675)



En septiembre de 1591 le aopareció una inflamación de la pierna derecha, acompañada de fiebre. Otro fraile de la comunidad presentaba síntomas similares. Aunque en un principio no le dio importancia, la inflamación va en aumento, por lo que los frailes le proponen acudir a un médico en Baeza. Pero Juan prefiere que lo vea un cirujano de Úbeda, ya que en Baeza era mucho más conocido. 

El 21 de septiembre Juan de la Cruz escribía una carta a Ana de Peñalosa donde decía: 
“Mañana me voy a Úbeda a curar de unas calenturillas que, como ha más de ocho días que me dan cada día y no se me quitan, paréceme habré menester ayudar de medicina; pero con intento de volverme luego aquí que cierto, en esta santa soledad me hallo muy bien”. 
Al llegar a Úbeda la inflamación había empeorado mucho y habían aparecido cinco úlceras.  


En Úbeda fue atendido por el cirujano Ambrosio de Villareal, que al ver el aspecto de la pierna decidió cortar urgentemente el tejido necrótico, sin esperar siquiera a administrar calmantes. Al parecer realizó una amplia resección de tejido. 
Según dicen, esta fue la conversación entre el fraile y el cirujano: 
- “¿Qué ha hecho vuestra merced, señor licenciado?”. 

- “Hele abierto a vuestra reverencia el pie y la pierna, y me pregunta qué le he hecho”, 

- “Si es menester cortar más, corte y enhorabuena y hágase la voluntad de mi señor Jesucristo”.
Archivo:Sanjuandelacruz-ubeda.JPG
Monumento a San Juan de la Cruz, en Úbeda. (Wikipedia Commons

Pero la resección lo logró atajar el mal. La evolución clínica de la pierna infectada empeoraba por momentos. Los medios terapéuticos que podían utilizarse en aquella época eran escasos y de dudosa eficacia. La erisipela ya alcanzaba la espalda, donde había aparecido un bulto (probablemente una úlcera de decúbito o un absceso). El paciente débil y lleno de úlceras casi no podía moverse, ni apoyar ninguna parte de su cuerpo. Llegaron a suspenderlo en el aire con una cuerda para evitar más llagas por decúbito.  
El enfermo, acorde con el pensamiento místico, que encontraba en el dolor un medio de santificación, decía frecuentemente: 
“Más paciencia, más amor, más dolor”.
En 1992 un grupo de investigadores, encabezados por Nazzareno Gabrielli director científico de los museos del Vaticano, estudiaron los restos del santo carmelita, concluyendo que la causa de su muerte fue una erisipela que provocó la aparición de úlceras de pierna. La extrema debilidad del santo, que realizaba frecuentes ayunos, contribuyó a expandir la infección, ocasionando una septicemia que terminó causándole la muerte.   

La erisipela es una infección de los tejidos profundos de la piel causada por estreptococos (Streptococcus sp.) que penetran a partir de una puerta de entrada (en general, una herida infectada). Se manifiesta por una zona inflamada, alrededor de la herida inicial. La piel está muy roja, con la superficie brillante y sensación de tirantez, dolorosa y caliente al tacto. Se acompaña de fiebre. Antes de la introducción de los antibióticos era una infección muy frecuente. 

Juan de la Cruz era aficionado a cultivar la tierra y acompañaba a otros frailes a cavar y a realizar trabajos agrícolas en la huerta del convento. Es probable que en el curso de estas labores se causara pequeñas heridas en la pierna que se infectaban con facilidad y podían derivar en una erisipela. Es revelador observar que otro de los frailes presentaba lesiones semejantes (incluso puede sugerir el uso de un apero de labranza infectado, usado por ambos). Antes de los antibióticos la erisipela evolucionaba frecuentemente a sepsis generalizada, que podía terminar con la vida del paciente como fue el caso de San Juan de la Cruz.   


Bibliografía

Enfermedad y muerte de san Juan de la Cruz. El Médico interactivo. 
https://elmedicointeractivo.com/enfermedad-y-muerte-san-juan-cruz-20110919185816068415/

Científicos consolidan el cuerpo de San Juan de la Cruz. El País, 1 de noviembre de 1992. https://elpais.com/diario/1992/11/01/cultura/720572404_850215.html




San Juan de la Cruz: Cántico espiritual: 





Rosalía & Raül Refree: Aunque es de noche 
(Versión de un poema de San Juan de la Cruz) 





Letra:
Que bien sé yo la fonte 
que mana y corre
aunque es de noche.

Aquella eterna fonte está ascondida,
que bien sé yo do tiene su manida,
aunque es de noche.

Su origen no lo sé, pues no le tiene,
mas sé que todo origen della viene,
aunque es de noche.

Sé que no puede ser cosa tan bella,
y que cielos y tierra beban della,
aunque es de noche.

Bien sé que suelo en ella no se halla,
y que ninguno puede vadealla,
aunque es de noche.

Su claridad nunca es escurecida,
y sé que toda luz della es venida,
aunque es de noche.

Sé ser tan caudalosas sus corrientes,
que infiernos, cielos riegan, y las gentes,
aunque es de noche.

El corriente que nace desta fuente
bien sé que es tan capaz y tan potente,
aunque es de noche.

El corriente que de estas dos procede
sé que ninguna de ellas le precede,
aunque es de noche.

Aquesta Eterna fuente está escondida
en este vivo pan por darnos vida,
aunque es de noche.

Aquí se está llamando a las criaturas
porque desta agua se harten aunque a oscuras,
porque es de noche.

Aquesta viva fuente que deseo
en este pan de vida yo la veo,
aunque es de noche.

miércoles, 27 de noviembre de 2019

La erisipela de San Juan de la Cruz (I)






Emilio Laiz Campos 

Monumento a San Juan de la Cruz
 (1962)

Estatua de bronce
(Foto: Juan Alcor, 2003)

Mauritshuis. La Haya. 




Juan de Yepes, más conocido como San Juan de la Cruz (1542-1591) fue un destacado poeta y místico castellano del renacimiento, que colaboró con Santa Teresa de Jesús en la reforma de la orden de Nuestra Señora del Monte Carmelo y en la fundación de la Orden de los Carmelitas Descalzos.

Autor de poesías místicas, es considerado no sólo como el máximo representante de la poesía mística castellana, sino también como el más destacado poeta de todos los tiempos en esta lengua.   

Juan nació en el pueblo abulense de Fontiveros, en el seno de una familia de judíos conversos. Tuvo una infancia llena de dificultades económicas y hay quien atribuye a la mala alimentación su corta estatura (al parecer medía 1,48 m, y Sta. Teresa lo llamaba jocosamente "mi medio fraile"). Sin embargo, la mejoría económica que supuso para la familia la boda ventajosa del hermano mayor, facilitó que Juan pudiese estudiar en el colegio de los jesuitas, recibiendo una sólida formación humanística. De todos modos también pagaba parte de sus estudios con su trabajo en el Hospital de Nuestra Señora de la Concepción de Medina del Campo, especializado en enfermedades venéreas.  


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Anónimo: San Juan de la Cruz (s. XVII) 


A los 21 años ingresó en el Convento de los Padres Carmelitas de Medina del Campo, con el nombre de Fray Juan de San Matías. Tras el noviciado, se traslada a Salamanca para estudiar Artes. Tras recibir las órdenes de presbítero, en 1567, conoce a Teresa de Cepeda y Ahumada (Sta. Teresa de Jesús) que le convence para emprender la reforma de la Orden del Carmelo, ya que estaba cada vez más relajada. Al año siguiente funda el primer convento de carmelitas descalzos (reformados) y para evidenciar más la reforma, cambia su nombre por el de Fray Juan de la Cruz. Junto con Teresa de Jesús, inicia una incansable tarea de fundar conventos de carmelitas descalzos. 


Santa Teresa de Jesús
(copia de un original de Fray Juan de la Miseria)

Pronto tiene que enfrentarse al conflicto entre Carmelitas Calzados y Carmelitas Descalzos. El conflicto no era solamente por los distintos enfoques de la vida religiosa sino que subyace una lucha entre el poder real y el pontificio para tener el pleno control de las órdenes religiosas. Esto desemboca incluso en su encarcelamiento en una prisión conventual de Toledo durante ocho meses (1577), lo que aprovecha para escribir el Cántico espiritual y otras poesías místicas de altísimo nivel literario. En 1578 protagoniza una rocambolesca fuga de la prisión. 

En 1590 es nuevamente destituido de todos sus cargos y trasladado a Úbeda, en donde al cabo de poco tiempo desarrolla una erisipela que a pesar de diversos tratamientos le producirá una septicemia y finalmente lo llevará a la muerte. 

Pero de la erisipela, de sus complicaciones y muerte de San Juan de la Cruz hablaremos en otro post del blog


Cántico espiritual (fragmento) 

¿Adónde te escondiste,
Amado, y me dejaste con gemido?
Como el ciervo huiste,
habiéndome herido;
salí tras ti clamando, y eras ido.

Pastores, los que fuerdes
allá por las majadas al otero:
si por ventura vierdes
aquel que yo más quiero,
decidle que adolezco, peno y muero.

Buscando mis amores,
iré por esos montes y riberas;
ni cogeré las flores,
ni temeré las fieras,
y pasaré los fuertes y fronteras.



Poesía "Noche oscura" de S. Juan de la Cruz:




San Juan de la Cruz. Vivo sin vivir en mí:



martes, 26 de noviembre de 2019

El blog ha alcanzado ya un millón de lecturas.








El blog "Un dermatólogo en el museo" 
ha alcanzado un millón de lecturas. 

Nuestro blog aumenta cada día el número de consultas. Lectores de todos los países visitan nuestro blog con creciente interés. Y así hemos llegado a rebasar el millón de visitantes. Gracias a todos vosotros por hacerlo posible. 

El blog no solamente se publica a diario, sin período vacacional alguno, sino que ha generado toda una serie de actividades complementarias. 


Durante una reciente visita con un grupo, en el claustro de la catedral de Girona (noviembre 2019)

Del blog han surgido: 

  • Un buen número de conferencias; 
  • Cursos en colegios de médicos, hospitales, academias médicas, y ateneos;
  • Clases en la Universidad; 
  • Algunas publicaciones en revistas, tanto impresas como virtuales; 
  • Un gran número de avisos en twitter (@xsierra4) y en otras redes sociales;  
  • Visitas virtuales a museos y exposiciones por parte de grupos interesados;
  • Contacto con directores de museos y exposiciones;
  • Contacto con asociaciones de pacientes y con diversas entidades médicas;
  • Participación en otros fórums y blogs, por invitación de sus coordinadores; 
  • Entrevistas en diversos medios de prensa escrita (revistas, diarios, suplementos semanales);
  • Programas en algunas emisoras de radio, tanto locales como en otros países; 
  • Programas de televisión en diversas cadenas sobre varias entradas del blog;
  • Visitas presenciales a museos por parte de grupos de lectores interesados en aumentar la información del blog;  


En la clausura del curso de Residentes 2018-2019 en el Hospital Trueta de Girona, también se realizó una conferencia sobre materiales del blog (junio de 2019)

Asimismo, las publicaciones del blog han sido citadas en diversos trabajos, tesinas y otras publicaciones. 

Además muchos de los lectores del blog (algunos procedentes de lejanos lugares) han tenido interés en tener un encuentro personal conmigo, lo que les agradezco sinceramente. 

En definitiva, el blog muestra una gran actividad y se demuestra útil como un elemento de comunicación cultural y humana. Debo agradeceros a todos vuestra acogida y el mantenimiento de este nexo de unión y conocimiento que intenta tender puentes entre la Medicina y las Humanidades. 

Muchas gracias a todos! Seguimos! 



En el curso "Medicina i Art" que se realiza, sobre materiales del blog,
en el Colegio de Médicos de Barcelona durante el curso 2019-2020



lunes, 25 de noviembre de 2019

Autorretrato tras ser golpeada






Nan Goldin

Autorretrato. Nan un mes 
después de ser golpeada  
(1984) 

Fotografía en color



Hoy, 25 de septiembre, se celebra el Día Internacional por la eliminación de la Violencia contra la Mujer. Un día que sirve denunciar la violencia que se ejerce sobre las personas, al ser discriminadas por su género en todo el mundo y para reclamar políticas en todos los países para su erradicación. Quiero adherirme a esta llamada a la conciencia social, para luchar por una sociedad realmente igualitaria, donde la condición o preferencia sexual no sean motivo de discriminación, ni mucho menos de violencia. Por eso hoy dedicaré el blog a una fotografía de la artista norteamericana Nan Goldin, que se ha convertido ya en un reconocido icono contra el maltrato a la mujer. 

Nan Goldin (Washington, 1953) es una prestigiosa fotógrafa estadounidense. Se graduó en la Escuela de Bellas Artes de Boston en 1978. Vive y trabaja en Nueva York, Berlín y París. 


Cubierta del libro "The Ballad of sexual dependency"
(1986) ilustrada con la obra de Nan Goldin 
Nan and Brian in bed (1981)
Muy influída por las corrientes contraculturales, practica una fotografía documentalista, comprometida con temas sociales, que es a la vez testimonio y denuncia. Goldin trata sin ambages algunos temas tabús como la homosexualidad, las difíciles relaciones de pareja, la dependencia sexual, la depresión, la pobreza, la marginalidad, las drogodependencias, la soledad, la enfermedad, o la violencia. 

Muchas veces, para enfatizar el efecto narrativo, recurre a series de fotografías en las que se adivina un cierto hilo argumental. Una de las más destacadas es La balada de la dependencia sexual (1986), en la que muestra el efecto devastador del sida en la juventud de los años ochenta. Otra serie algo posterior es La balada desde la morgue, en la que insiste sobre el mismo tema. 



El hematoma en forma de corazón expresa visualmente la 
amargura que se esconde tras algunas relaciones de dependencia emocional. 
Nan Goldin. Heart-Shaped Bruise, NYC (1980)

Nan Goldin
trabajó mucho el autorretrato. Uno de sus autorretratos más famosos es precisamente este Autorretrato. Nan un mes después de ser golpeada, en la que se muestra en un encuadre clásico, maquillada y de frente, mostrando hematomas y equimosis, con los párpados hinchados y 
mirando fijamente al espectador con mirada triste. La evidencia de la violencia en su cara es una amarga denuncia. Esta fotografía se ha convertido en un icono de la lucha feminista y en un auténtico manifiesto gráfico contra la violencia de género, una auténtica lacra social que debe ser erradicada cuanto antes de nuestra sociedad. 

Quiero terminar con una de mis pinturas, dedicado al tema del maltrato a la mujer. No pretende gustar, su objetivo es solamente remover conciencias y contribuir a erradicar cuanto antes esta horrible lacra social: 


Xavier Sierra: "Maltratada" Técnica mixta sobre lienzo 45 x 45 cm. 



Nan Goldin - The ballad of sexual dependence - David Lynch - Photography: