jueves, 28 de mayo de 2015

Sto. Tomás de Villanueva y el tiñoso







Bartolomé Esteban Murillo
(1617 - 1682)

Santo Tomás de Villanueva socorriendo a los pobres
(1678) 


Óleo sobre lienzo. 283 × 188 cm
Museo de Bellas Artes, Sevilla





Hacia 1665 Murillo recibió el encargo de decorar la Iglesia de los Capuchinos de Sevilla. El pintor se dedicó a trabajar en el templo durante varios años, transformándolo en un auténtico museo. La temática de la serie estaba dedicada a la vida de Santo Tomás de Villanueva, fraile agustino y obispo. A primera vista sorprende que una iglesia de capuchinos se decore con la vida de un santo que no pertenecía a la orden. Tal vez la procedencia valenciana del santo, que también era el origen de muchos de los frailes del convento, puede explicar este hecho.
Detalle con el niño de la tiña fávica
El lienzo que presentamos hoy  fue pintado hacia 1678, para el cuarto altar del lado de la Epístola de la mencionada iglesia. En él se muestra al santo obispo rodeado de menesterosos a los que socorre con sus limosnas. Lleva la mitra y el báculo, atributos de su dignidad episcopal y ofrece una moneda a un tullido vestido de harapos que se arrodilla ante él con gesto suplicante. Otros mendigos se sitúan a los lados del caritativo santo, con la esperanza de recibir el óbolo de sus manos. 

Entre los marginados destaca la figura de un niño (a la derecha) que permanece en pie, mirando al obispo con expresión arrobada. Podemos ver en su cabeza abundantes placas alopécicas que pueden interpretarse sin duda como tiñas. Las costras redondeadas, de aspecto cretáceo permiten incluso afinar algo más el diagnóstico: se trata sin duda de una tiña favosa, causada por el hongo Trichophyton schenkii, que era muy común en aquel tiempo y que provocan la aparición de zonas tonsuradas en el cuero cabelludo. 
El cuadro constituye una de las obras más destacadas del maestro sevillano, tanto por el refinamiento en el tratamiento de las figuras como por su cuidada composición. Parece ser que Murillo estaba especialmente orgulloso de esta obra. 


Murillo, un pintor al servicio de la fe: 


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