jueves, 6 de agosto de 2020

Bacterias efímeras, bacterias eternas

Rogan Brown, 'escultor' de bacterias y microorganismos




Rogan Brown

Cut microbe
(2015)

Papel cortado a mano 112 x 90 x 20 cm




Rogan Brown es un artista angloirlandés que realiza primorosas esculturas de papel. Corta con tijeras y cuchillas, disecciona hoja por hoja, produciendo capas que superpone, pela y agujerea. Se inspira en fósiles, corales, amebas, bacterias, virus y esporas, dejándose seducir por la arquitectura de la naturaleza y por la armonía del crecimiento orgánico.

Brown crea abigarrados paisajes que nos pueden recordar tanto un arrecife de coral o un fondo marino como a la prolija microbiota del intestino o de la piel. Algo que puede parecer efímero, como las propias esculturas de Brown. Y sin embargo, no siempre es así. 

Desde hace unos años era conocido que en los fondos marinos yacen bacterias en estado latente durante largos períodos de tiempo. Pero hasta ahora no sabíamos si estos microorganismos eran capaces de "despertar" de su letargo.  


Un reciente artículo publicado en la revista Nature Communications (28 julio 2020) ha intentado responder a esta cuestión. 
Yuki Morono, de la Agencia japonesa de Ciencia y Tecnología marina y terrestre y Steven D'Hondt de la Universidad de Rhode Island, Estados Unidos, realizaron una expedición al Pacífico con el buque de investigación JOIDES Resolution. Procedieron a estudiar el fondo marino a 5.700 m de profundidad, en una zona que a causa de las corrientes marinas, hay pocos organismos vivos. Procedieron a perforar el fondo, tomando muestras de un estrato situado a 75 m por debajo del fondo marino, correspondiente a un sedimento de barro arcilloso depositado allí hace 101'5 millones de años.   

Los científicos hallaron algunas formas de vida "hibernando" en este medio aparentemente inhóspito, especialmente bacterias, que se llevaban allí todo este tiempo. Se trataba de bacterias aerobias que pudieron sobrevivir en condiciones especialmente duras, debido a la escasez de oxígeno en su entorno. 

Los investigadores procedieron a incubar durante 557 días los microbios hallados en el fondo marino, aportando medios ricos en carbono y nitrógeno. En este medio propicio, las bacterias crecieron y se multiplicaron. Es sorprendente que se haya podido revivir bacterias de más de 100 millones de años, es decir que son coetáneas de los dinosaurios. Podemos decir que se trata de los seres vivos que han vivido más tiempo de todos los que conocemos hasta ahora.

Yuki Morono declaró: 
«Es sorprendente que una gran parte de los microbios hayan logrado superar el gran desafío biológico que supone sobrevivir tras un tiempo tan largo en condiciones adversas y con gran escasez de nutrientes y energía» 
La vida de las bacterias puede ser a veces efímera, pero a veces muy longeva. 



Bibliografía 

Y. Morono et alAerobic microbial life persists in oxic marine sediment as old as 101.5 million yearsNature Communications
Published online July 28, 2020. doi.org:10.1038/s41467-020-17330-1.



Aerobic microbial life persists in oxic marine sediments as old as 101.5 million years





No hay comentarios: