Diego Velázquez
Las Meninas (detalle)
Óleo sobre lienzo.
Museo del Prado. Madrid. |
La protagonista central del famoso cuadro Las Meninas, de Velázquez (1656), es la infanta Margarita Teresa, la niña rubia que ocupa el centro del cuadro y que aparece rodeada de sus damas y acompañantes.
Margarita María Teresa de Austria (1651-1673) más conocida como la infanta Margarita, nació en Madrid fruto del matrimonio del rey Felipe IV de España con su segunda esposa, Mariana de Austria. A pesar del alto grado de consanguinidad de su familia, Margarita era una niña bonita, de carácter dulce y alegre, hija favorita del rey, que siempre le llamaba cariñosamente "mi alegría".
Como muchas otras jóvenes de la realeza en aquella época, su matrimonio se convirtió en un asunto de estado. Margarita fue prometida desde los 9 años de edad a su tío, el emperador Leopoldo I de Austria (hermano de su madre). Con este compromiso se pretendía un acercamiento entre las dos ramas de la dinastía Habsburgo (la austríaca de Leopoldo I y la española de Felipe IV), ya que ambas se habían distanciado tras la firma de la paz de Westfalia, que puso a fin a la conocida como Guerra de los Treinta Años en Europa. La infanta Margarita moriría a los 21 años.
Pero veamos la posible patología que según algunos investigadores podía padecer la Infanta Margarita: un síndrome de McCune-Albright.
Juan Bautista Martinez del Mazo: Retrato de la infanta Margarita Teresa |
El síndrome de McCune-Albright es una enfermedad genética de baja incidencia que afecta a los huesos y a la piel, pudiendo además producir cambios hormonales y adelantar la pubertad.
La alteración genética se localiza en el brazo largo del cromosoma 20 (20q13.2), en el gen GNAS1, implicado en la codificación de las llamadas proteínas G, involucradas en el desarrollo de las estructuras músculo-esqueléticas y hormonales.
Se trata de un mosaicismo, es decir que la mutación se encuentra al azar en todas o afecta solamente a algunas células. La mutación se produce al azar en la formación del embrión. Los niños que sufren de esta enfermedad presentan un cuadro de displasia fibrosa, lo que ocasiona malformaciones óseas, que pueden producir un crecimiento anormal del cráneo, provocando sordera y ceguera, además de problemas estéticos con malformaciones de la cara.
La infanta presenta una tez muy blanca, y en la sien derecha de la infanta una mancha pequeñita café con leche. Esto puede ser el primer síntoma. El síndrome de McCune-Albright, congénito pero no hereditario, está constituido por una tríada clínica que comprende: manchas planas en la piel de contornos irregulares color café con leche, endocrinopatías múltiples y displasia fibrosa poliostótica. En opinión de algunos autores, como la Dra. Teresa Tuñón Álvarez podria ser también la enfermedad que afectó a Enrique IV de Castilla.
Velázquez: La infanta Margarita Teresa en blanco y plata |
La endocrinopatía tiene como manifestación principal y más frecuente la pubertad precoz, con menarquia en las niñas, que puede aparecer antes de cumplir el año de edad.
La causa de la afección es una mutación postcigótica en el GNAS 1 que codifica la proteína Gs. D. Se trata de una mutación en la posición 201 de dicha proteína, que genera una deficiencia intrínseca de guanidin trifosfato (GTP) que conduce a una activación persistente de la producción de adenilciclasa y adenosin monofosfato (AMP) cíclico.
Se puede identificar el síndrome en un individuo, cuando este presenta los siguientes síntomas:
- manchas de color café con leche en la piel
- pubertad prematura, con menarquia en la niñez y desarrollo prematuro de los caracteres secundarios sexuales
- ocasionalmente, displasia fibrosa poliostótica que puede predisponer a fracturas óseas.
- frente y los ojos prominentes
- posible hipertiroidismo
La sospecha que la infanta Margarita presentaba un posible síndrome de McCune-Albright puede basarse en diversos signos indirectos. Por una parte, la infanta presenta la piel muy clara con una mancha café con leche en la zona de la sien, lo que podría considerarse como una de las manchas características del síndrome de Albright. De ser así, probablemente tendría alguna otra en la espalda, lo que no podemos demostrar.
Podría opinarse que estas manchas pueden atribuirse a sombras casuales y no a pigmentaciones cutáneas. Sin embargo se repiten en otros retratos de la Infanta Margarita: dos retratos que se hallan en el Kunsthistorische Museum de Viena y otro en el Louvre.
Por otra parte, presenta una frente algo abultada. En otros retratos que le hizo Velázquez aparece con los ojos algo prominentes, lo que iría en favor de un cierto grado de exoftalmos. La postura de la infanta también puede sugerir una ligera escoliosis.
Por las crónicas sabemos que la infanta tenía un cierto bulto en el cuello que se esforzaba en disimular, lo que puede sugerir la presencia de un bocio. Por las crónicas sabemos que a los 21 años "permaneció tres semanas en cama aquejada de fuertes dolores en la garganta producidos por el tumor". En una angustiada carta enviada por su esposo a la corte de Madrid se dice: "la emperatriz ha empeorado desde hace dos semanas su condición del tumor de su garganta". Pocos días después fallecía, lo que se podría interpretar como una malignización de su bocio hipertiroideo, con probables metástasis a la garganta.
En cuanto a la posible pubertad precoz, llama la atención que la infanta, siendo todavía una niña aparezca vestida con ropa de adolescente. El busto aparece artificialmente rígido. Era costumbre en la época que al aparecer la telarquia (desarrollo mamario) se cubrieran con unas láminas rígidas de plomo. Esta podría ser la explicación de la rigidez del talle de la infanta Margarita. Probablemente había aparecido ya una precoz telarquia y ya se le habían colocado las láminas aplanadoras.
A todo eso se añade el búcaro de barro que le ofrece la menina María Agustina Sarmiento, en posición semiarrodillada como era costumbre en la Corte "al ofrecer un alimento" a un miembro de la familia real. Pero de este detalle, que es de gran interés, hablaremos en otra entrada del blog.
Agradecimiento
Podría opinarse que estas manchas pueden atribuirse a sombras casuales y no a pigmentaciones cutáneas. Sin embargo se repiten en otros retratos de la Infanta Margarita: dos retratos que se hallan en el Kunsthistorische Museum de Viena y otro en el Louvre.
Por otra parte, presenta una frente algo abultada. En otros retratos que le hizo Velázquez aparece con los ojos algo prominentes, lo que iría en favor de un cierto grado de exoftalmos. La postura de la infanta también puede sugerir una ligera escoliosis.
Retratos de la infanta Margarita Teresa donde se puede evidenciar bocio y un cierto exoftalmos |
Por las crónicas sabemos que la infanta tenía un cierto bulto en el cuello que se esforzaba en disimular, lo que puede sugerir la presencia de un bocio. Por las crónicas sabemos que a los 21 años "permaneció tres semanas en cama aquejada de fuertes dolores en la garganta producidos por el tumor". En una angustiada carta enviada por su esposo a la corte de Madrid se dice: "la emperatriz ha empeorado desde hace dos semanas su condición del tumor de su garganta". Pocos días después fallecía, lo que se podría interpretar como una malignización de su bocio hipertiroideo, con probables metástasis a la garganta.
En cuanto a la posible pubertad precoz, llama la atención que la infanta, siendo todavía una niña aparezca vestida con ropa de adolescente. El busto aparece artificialmente rígido. Era costumbre en la época que al aparecer la telarquia (desarrollo mamario) se cubrieran con unas láminas rígidas de plomo. Esta podría ser la explicación de la rigidez del talle de la infanta Margarita. Probablemente había aparecido ya una precoz telarquia y ya se le habían colocado las láminas aplanadoras.
A todo eso se añade el búcaro de barro que le ofrece la menina María Agustina Sarmiento, en posición semiarrodillada como era costumbre en la Corte "al ofrecer un alimento" a un miembro de la familia real. Pero de este detalle, que es de gran interés, hablaremos en otra entrada del blog.
Agradecimiento
Agradezco la colaboración y sugerencias de la Dra. Teresa Tuñón Álvarez.
Bibliografía
Valtueña O. Mi interpretación pediátrica de Las Meninas. Anales de la Real Academia Nacional de Medicina 1999 CXVI, cuaderno 3. 507-529
Boyce AM, Collins MT. Fibrous Dysplasia/McCune-Albright Syndrome: A Rare, Mosaic Disease of Gα s Activation. Endocr Rev. 2020 Apr 1;41(2):345–70. doi: 10.1210/endrev/bnz011. PMID: 31673695; PMCID: PMC7127130
Las Meninas. Audioguía infantil
Las Meninas. Audioguía infantil
Las Meninas cobran vida
Buenas tardes. Creo que existe una confusión el síndrome de Albrigth y el síndrome de Mccune Albrigth que se describe en el texto, son entidades nosológicas distintas, que tienen en común el nombre del médico que las describió pero no se parecen entre sí. Me podría aclarar a cual de los dos se está refiriendo? Muchas gracias
ResponderEliminarTeresa Tuñón Médico
Me refiero al Síndrome de McCune Albright. He corregido el texto del artículo y le agradezco la puntualización. Muchas gracias por leer el blog y por la oportuna corrección.
ResponderEliminarCordial saludo,
Permítame con todo el respeto, que disienta.
ResponderEliminarNo hay certeza ni por signos observados en la pintura ni por textos de sus biógrafos , que la infanta lo padeciera.
Entendiendo que puedo estar en un error podría dejar en este foro los criterios documentados con bibliografía actual? Se lo agradezco de antemano
Teresa Tuñón médico