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miércoles, 16 de septiembre de 2020

La morgue






Andrés Serrano

The morgue (Infectious pneumonia) 

(1992)

Prueba Cibachrome en marco del artista. 
Museo Colección Berardo. Lisboa




El Museo Colección Berardo fue fundada por el magnate y coleccionista de arte portugués José Manuel Berardo, que durante varias décadas hizo fortuna en Sudáfrica gracias a la extracción de oro, hasta que regresó a Portugal en los años 80 convertido en uno de los empresarios más ricos del país. Desde muy joven sintió interés por el arte y se dedicó a recopilar diversas obras hasta reunir una colección de más de 40.000 piezas. La primera vez que su colección abrió sus puertas al público fue en 1997, donde algunas de sus obras fueron expuestas en el antiguo casino de Sintra.


Visitando esta interesante colección de arte contemporáneo me encontré con esta obra, del fotógrafo estadounidense Andrés Serrano (1950), de reconocido prestigio internacional. Serrano tiene una clara voluntad transgresora y provocativa, y destaca por sus trabajos sobre cadáveres, miembros del Ku-Klux-Klan, torturas y víctimas quemadas. También ha realizado algunas series satíricas sobre el presidente Donald Trump.

La obra de Serrano como fotógrafo suele ser en forma de ampliaciones de 0.5 por 0.8 m, producidas con técnicas fotográficas convencionales (sin manipulación digital). Muchas de las fotografías de Serrano contienen fluidos corporales, tales como sangre (a veces del ciclo menstrual); semen, como por ejemplo, "Blood and Semen II" (1990) o leche materna. Dentro de esta serie hay numerosos trabajos de objetos sumergidos en estos fluidos. El más famoso de ellos es Piss Christ (1987) un crucifijo de plástico inmerso de un recipiente de orina. Esta fotografía causó una gran polémica la primera vez que fue expuesta, y llegó a ser denunciada por dos senadores estadounidenses. 

La integridad de la obra The Morgue

En la obra The Morgue, el fotógrafo nos transporta a un depósito de cadáveres, en el que capta imágenes de la cara (parcialmente cubierta) y del pie izquierdo. Destaca el color céreo de la piel, inerme, sobre la que todavía se dibujan algunas venas. En la cara se aprecian pequeñas arrugas cutáneas en la piel laxa e inánime. Una herida incisa del dorso del pie certifica que  se trata de un cuerpo sin vida. La sangre, en efecto, no mana de la herida, como sería el caso de un cuerpo vivo. El título nos aporta también la causa de la muerte: una neumonía infecciosa. Conocer este diagnóstico concreto aumenta el realismo y hace que el espectador sienta todavía más próxima la muerte. 

Por morgue se conoce el depósito de cadáveres (generalmente en un hospital) donde se almacenan los cadáveres para su estudio o en espera de ciertas pruebas como la autopsia o ciertos trámites policiales o jurídicos. Para la conservación de los cadáveres se suele recurrir a cámaras refrigeradas. 


La época en la que ir a la morgue era una atracción pública
Morgue de París. 

La palabra morgue es un término tomado del francés que significa "para ser mirado solemnemente". Fue utilizado inicialmente para describir el lugar de las cárceles en donde los prisioneros nuevos eran llevados para ser reconocidos en el futuro por los guardianes.

Adquirió su significado moderno en París, en el siglo XV, donde se usaba para describir el lugar del Grand Châtelet, una construcción del tiempo de Luis VI en  donde se resguardaban los cuerpos hallados en las calles o en el cercano Sena (también en revueltas sociales como más tarde sucedió) para que fueran reconocidos por sus familiares. 

Le Grand-Châtelet de París, alrededor de 1800

En 1718 el Dictionnaire de l'Académie definía a la morgue como:

Un lugar en le Châtelet donde los cadáveres que se han encontrado están expuestos y a la vista del público para que sean reconocidos. 

Los cuerpos procedentes en su mayoría de accidentes, asesinatos o suicidios eran llevados al sótano a donde los familiares identificaban a sus muertos a través de una rejilla; a este sitio se le denominaba Basse-geôle. Sin embargo, no se trataba de un espacio cerrado, medicalizado y de estricto acceso como es en la actualidad, sino un lugar muchas de las veces insalubre, descuidado, medio descubierto y de entrada libre, como si de una atracción pública se tratara.

Paris, La Morgue - Marlet JeanHenri en reproducción impresa o copia al óleo  sobre lienzo.
Jean Henri Marlet. La Morgue de París. 

En 1808, el Grand Châtelet fue destruido por orden de Napoleón en 1808, y en su lugar se construyó la Plaza del Châtelet y el Teatro del Châtelet. La Morgue, ya denominada oficialmente así, se trasladó al Quai du Marché Neuf y Pont St. Michel, en una área cercana al cuartel de policía, el juzgado y la facultad de medicina de La Sorbona. La Morgue ya no fue un lúgubre y mal ventilado sótano sino un mausoleo tipo griego en donde los cadáveres eran exhibidos en una sala especialmente diseñada para ello, con ventanas de vidrio y mucha luz natural, así que la gente se congregaba para mirar los cuerpos que eran colocados en losas de mármol inclinadas. Esta Morgue fue a su vez demolida en 1864. 


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